Las mascotas, con el paso de los años, han cobrado mayor importancia en la vida de las personas. Son parte fundamental de la familia, por lo que cada vez hay más establecimientos que permiten el acceso con sus dueños, es decir, son “pet friendly”.
Los especialistas recomiendan que, si el perro está solo todo el día en casa mientras su dueño se va a trabajar, una buena solución puede ser llevárselo consigo. Todo dependerá del tipo de empleo, por supuesto, pero en algunos países en muchos lugares de trabajo consideran la petición de tener a un perro.
Está comprobado que fragmentar la cotidianidad que se vive en las empresas genera beneficios en el entorno laboral, y una de las formas que las entidades han encontrado para promover un mayor rendimiento de sus empleados es permitir que los trabajadores lleven sus mascotas a la oficina.
Algunos beneficios que las compañías han notado al hacer esta actividad es la disminución del estrés, aumentar la creatividad, buena relación entre los miembros de la entidad, e incluso tiene efectos positivos en la salud de los empleados. Ya existen empresas que han promovido los días “Pet friendly” para impactar en los empleados.
Mascotas cada vez más importantes en la vida de las personas
La Condusef señala que el 77% de la población cuenta con una mascota, lo que equivaldría a 7 de cada 10 hogares, de los cuales, 40 millones son perros. Además, los gastos en México van de lo 100 pesos al mes a los 1500 solo contando el alimento, ya que la salud y aspectos inesperados suelen ser aún más costosos.
Quienes recomiendan esta práctica piden a los dueños reflexionar antes de solicitarlo en el empleo y considerar los puntos siguientes:
Consultar a los compañeros - ¿hay alguien alérgico o con mucho miedo a algún animal?
Consultar al jefe - ¿la ley permite mascotas en la oficina?
Las destrezas de buena obediencia son esenciales – en ningún lugar de trabajo se tolerarán los ladridos, mordiscos y “accidentes”.
La oficina no es un terreno de juego – tu mascota tendrá que estar sentado tranquilamente y dejar que las personas sigan trabajando.
Si todos los que trabajan en la oficina están de acuerdo, es posible que se pueda pasar el día con el perro tumbado a los pies de la mesa de trabajo.
Oficina segura, mascota feliz. Las empresas tienen distintos elementos que pueden suponer un peligro para los peludos. Por eso es aconsejable que, antes de llevar al perro al trabajo, se retiren los cables o cualquier otro objeto que pueda suponer una amenaza.
Se debe asear a la mascota. Hay que tener en cuenta que ahora el lugar de trabajo se convertirá en un punto de encuentro de más de un animal y que, por tanto, se generará un ambiente donde a los olores del día a día se sumen los de las mascotas. Aunque siempre tienen que estar limpios, los animales autorizados a ir a la oficina lo tendrán que estar más que nunca. Para evitar que causen rechazo, es muy importante mantenerlos aseados de forma más cuidadosa y una visita al pet shower es más que recomendable.
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